Como todos los años, el fútbol nos deja a lo largo de 10 meses momentos y estampas inolvidables dignas de permanecer en el recuerdo, aunque es cierto que algunos equipos y jugadores seguramente estarán ansiosos de que llegue la temporada siguiente para pasar página y dar carpetazo a un mal año presumiblemente en lo personal y quizás también en lo colectivo. Así que dicho esto, al margen de las ya consabidas revelaciones del año (equipos con los que casi nadie contaba como el increíble Southampton comandado por Koeman, un Wolfsburgo que ha hecho las delicias de los aficionados de la Bundesliga, e incluso un Barcelona por el que nadie daba un duro a mitad de temporada y en el que la gran mayoría pedía la cabeza de Luis Enrique y que finalmente ha acabado llenando sus vitrinas con un triplete histórico; y la aparición estelar de jugadores de increíble futuro y que no han dejado de resonar como los gunners Coquelin y el español Héctor Bellerín, el todoterreno del Leverkusen Karim Bellarabi, el desahuciado Salah que ahora arrasa en Florencia, un Luciano Vietto que se ha dedicado a reventar porterías en su primer año en la élite en España, un Paulo Dybala que ahora emerge como el futuro de una Juve resurgida, un Jonathas que ha pasado de jugar en la mitad de la tabla de la Serie B italiana a tirar de las riendas de un Elche cada vez más venido a menos, o un Harry Kane por el que se pelea media Europa).
Al margen de todos estos y más triunfadores, quedan los bluffs, las dolorosas decepciones de una temporada llena de sorpresas.
EQUIPOS QUE HAN DECEPCIONADO
REAL MADRID
1 Supercopa de Europa y un Mundialito de Clubes parece un bagaje demasiado pobre para un Madrid que nuevamente reventó el mercado de fichajes (80M por la gran revelación del pasado Mundial James Rodríguez) y al que le tocaba defender corona en Europa y título de Copa del Rey. Es triste que tras un inicio de temporada algo dubitativo (sobre todo tras el descalabro de la Supercopa de España ante el Atleti), Ancelotti encauzó el vuelo haciendo que su equipo practicara el mejor fútbol que se ha visto este año en Europa, con un récord histórico de victorias consecutivas en el viejo continente. Por ello, duele aún más el descalabro de una segunda vuelta en la que las piernas de muchos futbolistas dejaron ya de responder dando paso a un equipo cada vez más tocado y falto tanto de respuestas puramente futbolísticas como técnicas, con un Ancelotti que acusó lo limitado de su 11 inicial y la tremenda baja forma o dudoso nivel de su banquillo para todo un Real Madrid, y que acabó con la impopular destitución del técnico italiano. Esperemos que este año su presidente se deje de extraños negocios y operaciones de marketing y se centre en completar un buen equipo que por una vez sí que sea capaz de aspirar a todo.
BAYERN MÚNICH
Ganar una Bundesliga no debería ser considerado un fracaso ni mucho menos, pero es cierto que si cuentas con un equipo notablemente superior al resto de tus competidores, con un presupuesto y una masa social que posiblemente los triplique, y una tanda de jugadores única en Europa, la temporada de los de Pep dista mucho de haber sido un éxito. Superados en Supercopa por un Borussia plagado de bajas y apeados de la final de Copa y de Champions por un Barcelona arrollador, es evidente que todos esperábamos del gigante teutón. En su defensa cabe destacar la increíble plaga de lesiones que se ha cebado con la plantilla (y que ha finalizado con la destitución de su preparador físico), pero aun así todos esperábamos algo de más nivel en el resto de competiciones por parte del equipo.
MANCHESTER CITY
A cada año que pasa, el proyecto del jeque de nombre imposible va estancándose cada vez a pasos más agigantados. En Premier el descalabro ha sido descomunal, pasando de estar incluso en cabeza alguna jornada a llegar a peligrar su presencia en Champions, y en el resto de competiciones más de lo mismo. Un equipo algo descompensado en algunas de sus líneas (defensa y centro del campo mejorables), muy irregular (capaz de golear 7-0 que de caer al siguiente partido sin casi ni siquiera tirar a puerta), y años después sin ser capaz de dar la cara ante los grandes de Europa en Champions (nuevamente apeado en Octavos por un Barcelona que cada vez siente menos miedo ante ellos). Es probable que buena culpa de ello la tenga su, por otro lado, excelente entrenador, incapaz de dar con las teclas que mejor hagan funcionar al equipo, aunque ya ha quedado visto y comprobado que Pellegrini es capaz de lo mejor con equipos de media tabla (ese Villarreal y ese Málaga comandando en Europa) y de lo peor (¿acaso alguien ha olvidado ese Alcorconazo de nefasto recuerdo para los madridistas?).
MILAN
Siendo un habitual ya de este tipo de estadísticas, el viejo Milan cada vez parece sentirse más de capa caída a cada temporada que pasa y lejos quedan ya aquellos tiempos en los que no solo era el equipo más temido de Europa de la mano de técnicos como Arrigo Sacchi o Carlo Ancelotti, y donde todos los jugadores aspiraban a jugar alguna vez en su vida. Hoy, siendo arrancadas sus viejas leyendas, se ha convertido en un cementerio de jugadores que ya han dado lo mejor de su fútbol (Mexes, Essien, Abbiati), de otros que creían que sería el trampolín perfecto con el que lanzar sus carreras (El Shaarawy, eterna promesa de la cantera milanista, la estrella nipona Honda, o el coloso central francés Adil Rami), y de otros que definitivamente no merecen vestir la histórica camiseta que llevan en sus espaldas (Sulley Muntari, Zapata, o Pazzini). Un histórico inmerso en una interminable depresión de la que ni siquiera ha logrado hacerle sentir un nombre respetado como el Pippo Inzaghi, y que ha llegado estar más cerca de los puestos de descenso que de los de Europa. Una lástima que en este resurgir del Calcio protagonizado por Juventus, Fiorentina o Nápoles no formen parte ninguno de los grandes de la ciudad, ni Milan ni Inter. Tiempo al tiempo.
BORUSSIA DORTMUND
Uno de los casos más extraños del año lo encontramos en el mayor aspirante a darle la brasa al Bayern de Pep en Bundesliga. A pesar de haber de perder cada año a una de sus estrellas (tras Gotze, este año le ha tocado el turno al gigante polaco Robert Lewandowski), la mano de hierro de Jurgen Klopp y una serie de fichajes con muy buena pinta como Mkhitaryan o Aubameyang, se esperaba al menos un mejor papel en Bundesliga que un séptimo puesto por el que han llorado sangre para conseguirlo, permaneciendo varias jornadas en descenso, siendo eliminados en Octavos de Champions con una imagen bastante mala y rematando la temporada con la derrota en la final de la Copa Alemana. En su defensa podría alegarse las largas bajas y las interminables lesiones que han sufrido las estrellas del equipo como Marco Reus, y que los sustitutos de Lewandowski no han rendido como se esperaba, o que otros equipos como el Wolfsburgo, el Monchengladbach o el Augsburgo han dado un paso al frente en toda regla, pero ello no debería de servir de excusa para un equipo que casi llegó a ser Campeón de Europa hace la friolera de dos años y en éste ha pasado más que de puntillas.
ATLÉTICO DE MADRID
Es cierto que a estas alturas pudiera parecer de oportunista criticar la excelente labor del Cholo Simeone frente al banquillo del Atleti, y más después de haber roto el dominio Barsa-Madrid en Liga y a solo segundos de haber sido Campeones de Europa. Sin embargo, también es cierto que precisamente con semejantes éxitos recientes en su haber, a los del Cholo bien podría habérseles exigido un palmarés algo más abultado que una Supercopa de España en la que debía ser la temporada de su confirmación definitiva de que habían llegado para quedarse. Quizás los desmarques del Cholo para quitarse presión ("nos conformamos con ser terceros en Liga y luchar contra Valencia y Sevilla", decía a comienzos de Liga) han calado demasiado hondo en una plantilla algo más relajada que la temporada anterior, al igual que la fuga de sus principales baluartes (Costa, Filipe o Villa) no han sido suplidos con la eficacia necesaria, lo cual unido al descenso de nivel de otros jugadores como Arda o Koke ha acabado por desmarcar al equipo colchonero de la pelea por los títulos. Y lo que es más preocupante, dando una imagen de amarrategui y de catenaccio no esperada por los propios aficionados, contando por bostezos los minutos de juego del equipo. A pesar de todo, destaca lo meritorio de su bagaje en sus enfrentamientos contra el su vecino el Real Madrid, siendo derrotados en tan solo una ocasión y birlándoles el título de la Supercopa. Esperemos que en la temporada siguiente, apuntalando el equipo con fichajes de categoría y tratando de aspirar a cotas más altas, los de la ribera del Manzanares vuelvan a ser un serio aspirante a todo.
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